Depilación láser VS IPL, ¿en qué se diferencian?

depilación láser VS IPL

Aunque su funcionamiento y finalidad sea similar, son muchos los que no distinguen la depilación láser y el IPL, es decir, la depilación mediante luz pulsada. Por ello, te explicamos en qué se diferencian principalmente, puesto que estos tratamientos tienen características muy distintas.

Para empezar, lo que provoca mayor confusión es que ambos métodos son fotodepilación, término que designa la técnica por la que eliminamos el vello corporal mediante la utilización de la luz. Cuando el rayo de luz es absorbido por el fotículo, el calor ocasiona la pérdida del vello.

El láser es la técnica más veterana. En el anterior post te explicábamos todo lo que siempre has querido saber sobre ella. Resumimos las características por las que destaca:

  • Es unidireccional, sin divergencia, con una única dirección y longitud de onda.
  • Concentra la radiación en un solo punto, con una alta concentración de energía.
  • Monocromática: de un solo color específico para ser absorbido por la melanina

¿Cómo funciona la depilación láser?

La energía aplicada se transporta a través de la melanina del vello y finaliza en la raíz del pelo para destruirla, sin dañar la piel. Esta técnica se conoce como fototermólisis selectiva.

Los principales tipos de láser utilizados en depilación son:

  • ALEJANDRITA. Longitud de onda 755 nm.
  • DIODO. Longitud de onda 800nm.
  • NEODIMIO-YAG. Longitud de onda 1064 nm.

¿Cómo funciona la luz pulsada?

Como su propio nombre indica, en vez de ser un haz continuado, funciona con pulsos de luz y se caracteriza por ser un tratamiento más lento, puesto que presenta unas características distintas que son:

  • La luz pulsada se mueve en distintas direcciones y presenta distintas longitudes de onda.
  • El haz de luz es policromático.

La principal diferencia es que para el láser se deben aplicar un tipo específico de luz en función del tipo de piel y de vello para conseguir resultados óptimos; mientras que la IPL está adaptada a un espectro más amplio del tipo de piel y vello al dirigir ondas de longitud variable. Con esta técnica es posible realizar las sesiones durante el verano y con la piel bronceada. Respecto al láser, es aparentemente el tratamiento más efectivo en pieles claras con vellos oscuros.

Todo depende de las necesidades y del tipo de piel y vello de cada persona. Para ambos casos, el tratamiento se debe repetir anualmente porque los fotículos pueden reactivarse a lo largo de tu vida. Ante la duda, consulta con un profesional para saber cuál es el que más te conviene.