Para mantener una buena salud bucal y evitar las caries, la gingivitis u otras enfermedades periodontales que nos perjudiquen, sigue estos consejos de manera que puedas disfrutar de una boca sana y una bonita sonrisa.
Salud bucal, tú prioridad
- Acude al dentista al menos dos veces al año, nos realizará un chequeo y una limpieza dental.
- Sigue buenos hábitos diarios de higiene bucal: después de cada comida, al menos dos veces al día: el cepillado de dientes de unos cinco minutos, el uso de seda dental y/o cepillo interdental (para limpiar los espacios interproximales), y el colutorio, nos proporcionará una buena limpieza. Nuestro dentista podrá recomendarnos el tipo de colutorio y de pasta de dientes que más nos conviene. Sé constante y minucioso.
- Realiza el cepillado después de que haya pasado media hora tras tu comida, ya que en esa primera media hora el ataque ácido en los dientes es más intenso y si los cepillas podrías dañar el esmalte.
- Cambia tu cepillo cada tres meses para que cumplan su correcta función.
- Controla el cepillado: aunque parezca algo desorbitadamente básico, no todo el mundo realiza un correcto cepillado, lo cual es fundamental. Recuerda ejecutar movimientos verticales más que horizontales, arrastrando el cepillo de arriba abajo sin dejar ningún hueco de difícil acceso. Inclina el cepillo 45º entre diente y encía para eliminar las bacterias del margen gingival. Las encías también pueden ser frotadas levemente, al igual que la lengua e incluso el paladar. En la superficie de mordida realiza un movimiento de cepillado suave hacia atrás y adelante.
- Cuidado con el estrés: algunos hábitos que nos provoca el estrés, como rechinar los dientes, apretarlos en exceso, morder lápices, uñas o hielo, desgasta la superficie afectando al soporte dental (ligamento, hueso y encía). Este desgaste provoca movilidad anormal en la mandíbula y molestias.
- Ojo con lo que ingieres: el PH de la saliva se vuelve más ácido debido a hábitos pocos saludables de la alimentación, atacando directamente al esmalte de los dientes. Evita el exceso de dulces (la caries se nutre de alimentos ricos en azúcares), el tabaco o el abuso de bebidas ácidas o carbonatadas.
- Consume alimentos ricos en fósforo: huevos, leche, pescado, legumbres, nueces y calabacines. Fortalecerá tus dientes.
- Mastica chicle sin azúcar: ayudará a evitar la caries dental al sacar de entre los dientes las bacterias. Además, facilita la producción de saliva, que contiene calcio y fosfato.
Y tú, ¿sigues todos estos consejos de salud bucal para conseguir una sonrisa perfecta?